Con motivo del día 10 de Junio recordamos el compromiso con la educación vial
Sólo el 35,05% de los conductores respeta y cumple los límites de velocidad fijados en entornos escolares. Es decir, que casi 7 de cada 10 conductores excede los límites máximos de velocidad en zonas con usuarios vulnerables.
La educación vial es primordial para los más pequeños, debido a que es en esta etapa en donde corren más riesgo por la poca capacidad que tienen de percibirlo. Los aspectos básicos deben ser inculcados en casa y en las aulas, como por ejemplo, las normas de circulación peatonal, las principales señales de tránsito, así como también enseñar los riesgos que tienen como peatón. Todos estos temas de manera dinámica y didáctica para que puedan entenderlo y ponerlo en práctica.
Una de las actividades que más disfrutan los niños es jugando y ¿por qué no hacerlos fiscales de tránsito por un día? o ¿conductores en coches de juguetes o en patinetes? hay muchas maneras de enseñar jugando, aspectos muy importantes en la sociedad.
Es por esto que, Fundación Feu Vert colabora con fundaciones como la de Fundtrafic, fundación de la Asociación DIA de Víctimas de Accidentes, desarrolla la tarea de sensibilizar e inculcar el conocimiento vial mediante el entretenimiento y el juego. Gracias a la conciencia de empresas como Feu Vert los menores aprenden educación vial.
Que los más pequeños sepan cómo moverse de manera segura, bajo la vigilancia de los adultos, que recuerden que antes de cruzar un paso de peatones hay que observar en las dos direcciones o que antes de que el coche arranque el cinturón de seguridad debe estar bien sujeto, son conceptos que hay que enseñar desde bien pequeños.
Francisco Canes, presidente de Asociación DIA y Fundtrafic, destaca la acción responsable de Feu Vert en las escuelas: “llevar la educación vial a la escuela con empresas responsables como Feu Vert es para Fundtrafic, una labor social de calado que se traduce en formación, prevención y conciencia, protegiendo a la parte de la población más vulnerable como son los menores”.
Solo creando conciencia desde la infancia se logran adultos comprometidos y educados en seguridad vial. Los países nórdicos, por ejemplo, son los que menor número de víctimas de tráfico tienen en Europa y eso que sus condiciones climatológicas dificultan la conducción. Esto se debe a su educación. Suecia sigue siendo el país de referencia en cuanto a conciencia social en materia de seguridad vial.
La Visión Cero está arraigada en la población y aunque el objetivo parezca inalcanzable, todas las autoridades y organismos (públicos como privados) reman conjuntamente por la seguridad vial con el objetivo de reducir los accidentes de tráfico. Los Países Bajos tienen la cultura de la bici integrada, además de crear un sistema sostenible, responsable y menos contaminante inculcan a la población la necesidad de moverse de manera segura y responsable desde la escuela.
Desde 1959 en estos países la educación vial resulta obligatoria; con un examen teórico y práctico al finalizar Primaria para moverse de manera independiente con su bici a partir de los 12 años.
Extender la cultura vial es también inculcar la concienciación, la formación y la prevención de accidentes viales. Un camino largo en el que tenemos que elegir a compañeros de viaje dispuestos a trabajar por la seguridad en el asfalto.